El 17 de diciembre de 1903, en Kitty Hawk, Carolina del Norte, el Wright Flyer se convirtió en la primera máquina propulsada más pesada que el aire en lograr un vuelo controlado y sostenido con un piloto a bordo. Mientras trabajaban en su avión, Wilbur y Orville Wright probablemente nunca imaginaron cómo la aviación transformaría las comunicaciones en todo el mundo, transportando cartas y carga más lejos y más rápido. Iluminados por las posibilidades, los países y las aerolíneas establecieron nuevas tarifas y rutas, y pronto una carta podría viajar alrededor del mundo por una suma módica. Las naves más pesadas que el aire incluyen no solo biplanos y aviones jumbo, sino también planeadores, helicópteros, hidroaviones, catapultas y cohetes para transportar correo. Pilotos privados, pilotos postales, pilotos comerciales y pilotos militares volaron correo, al igual que pilotos muy famosos como Charles Lindbergh y Amelia Earhart.
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