La publicidad ha sido durante mucho tiempo una herramienta comercial importante y los administradores postales de EE. UU. la han utilizado para alertar al público sobre nuevos servicios, tarifas o regulaciones. Pero hay otro aspecto de la relación servicio postal-publicidad: el uso de imágenes, objetos y temas postales en anuncios no postales.
En el siglo XX, las empresas consideraban las imágenes postales como una forma abreviada de las cualidades que esperaban que el público asociara con sus productos y servicios. Las empresas que querían enfatizar la confiabilidad, la importancia o la velocidad de su producto podían usar imágenes postales en sus anuncios para ayudar al público a ver esas conexiones.