Para 1890 los jugadores negros estaban excluidos del béisbol professional por acuerdo entre los dueños de equipos blancos. En su lugar, los jugadores afroamericanos y latinoamericanos encontraron oportunidades para jugar en las varias Ligas Negras, así como en México, Cuba y el Caribe. El Béisbol de las Grandes Ligas se integró en 1947 al contratar a los mejores jugadores de las Ligas Negras, lo que condujo al eventual colapso del béisbol negro. En 2020, el Béisbol de las Grandes Ligas reconoció a las Ligas Negras como ligas mayores, y anunció que las estadísticas de los jugadores de las Ligas Negras se incorporarían a los libros de récords de la MLB.
Durante su época como lanzador en las Ligas Negras, Andrew Benjamin, «Rube», Foster (1879–1930) envió postales frecuentemente a su esposa Sarah y a su hijo Earl. Sobresalió como dueño, gerente y organizador, dirigiendo dos equipos negros de béisbol, formando la Liga Nacional Negra en 1920, y organizando la primera Serie Mundial Negra en 1924.
Documentos relacionados con la carrera de Edward Bolden, 1941–1944
Varios jugadores profesionales de béisbol, blancos y negros por igual, tenían trabajos comunes y corrientes para complementar sus modestos salarios. Algunos encontraron empleo como trabajadores postales, incluyendo a Edward «Ed» Bolden (1881–1950), gerente del Club Atlético Hilldale de las Ligas Negras y secretario especial en la oficina central de correos de Filadelfia.