En un momento en que había pocas oportunidades disponibles para las mujeres afroamericanas, Sarah Breedlove (más tarde Madam C.J. Walker) (1867-1919) se hizo famosa. Una tarde soñó con vender productos para el cabello para curar la calvicie e hizo su sueño realidad. Con la ayuda de su esposo y su hija, Madam Walker vendía sus productos para el cabello y cosméticos de puerta en puerta. Su negocio se expandió rápidamente, convirtiéndose en una de las empresas afroamericanas más grandes del país. Se convirtió en la primera mujer millonaria estadounidense. El éxito de su negocio creó oportunidades para miles de mujeres negras en salones de belleza de todo el país. Madam Walker también fue una dedicada filántropa y activista política que apoyó la educación, los problemas de los veteranos, los derechos políticos y la igualdad de oportunidades para los afroamericanos.
