El Departamento de Correos implementó un servicio de giros postales durante la Guerra Civil para brindarles a las familias una mejor forma de intercambiar dinero con los soldados que se encuentran lejos de casa. Cuando comenzó el servicio en 1864, los giros postales eran solo para uso doméstico.
En 1869, el servicio se amplió para incluir giros postales extranjeros. El servicio era popular entre la creciente población inmigrante del país. Esta tarjeta muestra las tarifas de los giros postales a partir de enero de 1907. Los giros postales siguen siendo un método popular para garantizar la seguridad de las transferencias financieras.
